Celler de Can Roca, Girona

Ahora ya puedo decir que he ido a cenar al mejor restaurante del mundo… y 2 veces!!! Se llama El Celler de Can Roca y está en Girona.

Es un momento para ir cada uno a su ritmo, sin prisa pero sin pausa, degustando cada bocado que te llevas a la boca y saboreando cada sorbo de la copa en tus labios. El tiempo pasa y no te das cuenta embelesado por cada nueva creación y las sensaciones que cada plato despierta en cada uno.

 

Tanto el espacio interior como el exterior es muy agradable. Predomina la madera, el color blanco y los grandes ventanales, la luz es cálida y las mesas están lo suficientemente separadas como para no poder escuchar las conversaciones de mesas vecinas.

Tengo que decir que, todo y que utilizan las técnicas culinarias de última generación, los alimentos tienen el aspecto, la forma y el sabor que tienen que tener. Me refiero a que si te ponen lenguado, te sirven el trozo de pescado tal cuál, eso si… con un gusto increíble. Parece mentira que una simple sopa de cebolla o el aceite de la escalibada pueda tener un gusto tan intenso y excepcional.

No hay que preocuparse por qué cubiertos hay que utilizar, ya que en cada momento traen  los utensilios adecuados dependiendo del plato a degustar. De hecho, al principio te hacen coger las cosas con los dedos!!

El Menú:

 

Los platos no son generosos, son simplemente una muestra, una pequeña obra de arte que te da pena desmontar. Pero como hay tantos, os puedo asegurar que no os quedaréis con hambre. Recomiendo no pasarse con el pan (está delicioso y hay de diferentes sabores), ya que sino acabaréis demasiado llenos. Me sorprendió que tanto la primera como la segunda vez, solamente hubiera dos platos de carne: steak tartar y cordero en 2011, y cerdo ibérico y cordero en 2012. El resto era una combinación de pescado, marisco, y verduras. Cada plato está elaborado de tal manera que aunque no os guste el pescado, éste si que os gustará! Os lo aseguro.

         

El Maridaje: 

La primera vez que fui, hice el menú Festival con maridaje, y la segunda vez que fui sin maridar. La verdad es que hacer el maridaje con un menú degustación de éstas características vale muchísimo la pena.

Lo que me sorprendió fue ver al sumiller abriendo una botella, servirse una copa y llevársela a los labios… lo prueban ellos para ver si está en las condiciones óptimas o no, y la verdad es que me quitaron un peso de encima, ya que yo solo se si un vino me gusta, o no me gusta. En general, cuando se habla de vino, todo el mundo entiende pero nadie sabe!

Lo único que me supo mal es que al final de la cena, a mi se me acumulaban las copas. Pero repito, si os gusta el buen vino, es una experiéncia que deberíais hacer.

Tengo que reconocer, que de las dos veces que he ido, me quedo sin duda con la primera. Que el menú fuera con maridaje le dio un plus, la generosidad con la que te servían tanto la copa de cava al acabártela al principio de la cena, como el pan durante toda la velada no tuvo nada que ver. La segunda vez, solo te sirven una copita de cava al inicio y el pan contadas veces. Además, la primera vez, encontré los platos  mucho más sabrosos y conseguidos, me gustaron TODOS sin excepción. La última vez, los postres me decepcionaron un poco, casi todos tenían mucho azúcar y eran un poco empalagosos.

En referencia a los precios, en 2011, el menú Festival con maridaje y cafés costó 211€ por persona. En 2012, el menú costó 165€ más el vino. Doy por hecho que desde que está considerado el mejor restaurante del mundo, los precios se habrán disparado aún más. Hay a quién le duela gastarse tanto dinero en una cena, otros preferirán gastarlo en un viaje u otras cosas, pero bajo mi punto de vista, si os lo podéis permitir, aunque solo sea una vez, os lo recomiendo ; )

Contacto:

• El Celler de Can Roca
• Can Sunyer, 48
• 17007 Girona
• Teléfono: 972 22 21 57
• E-mail: restaurant@cellercanroca.com
• Web: www.cellercanroca.com